Uriarte

Los diarios de Uriarte.

He estado en la cárcel, he hecho una huelga de hambre, he sufrido un divorcio, he asistido a un moribundo. Una vez fabriqué una bomba. Negocié con drogas. Me dejó una mujer, dejé a otra. Un día se incendió mi casa, me han robado, he padecido una inundación y una sequía, me he estrellado en un coche. Fui amigo de alguien que murió asesinado y que fue enterrado por los asesinos en su propio jardín. También conocí a un hombre que mató a otro hombre, y a uno que se ahorcó. Solo es cuestión de edad. Todo esto me ha sucedido en una vida en general muy tranquila, pacífica, sin grandes sobresaltos.

Sabía que este libro me iba a encantar. Un tipo inteligente que se dedica básicamente a leer, escribir, a una cierta vida en el mundillo literario (artículos, presentaciones, etc) pero no tanta que le impida decir lo que piensa de unos y de otros, muy afrancesado en sus lecturas. Condenados a entendernos.

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Iñaki Uriarte

Una odisea conseguir este libro de Uriarte.

1) Compruebo que no está en la Biblioteca Pública de Andalucía, en Granada, mi ciudad;
2) También vía web, veo que no aparece en el catálogo de La casa del libro;
3) Ni en el de Agapea;
4) Me inscribo en Fnac y lo pido. Me dicen que va para 10 días;
5) Aviso de Fnac de que se retrasa (más aún) el asunto;
6) Llamo por teléfono a Picasso, en Granada y me dicen que ni lo tienen ni lo pueden conseguir (¿¿??);
7) ¡Idéntica respuesta en Babel!
8) Entro en la web de Pepitas de calabaza (Logroño) y no ofrecen allí la posibilidad de comprar, ni de contactar, ni de nada, sólo los datos del distribuidor, en Madrid;
9) Llamo al distribuidor en Madrid y lo encargo, me dicen que tardará una semana. Anulo el pedido en Fnac;
10) No una semana más tarde, sino 12 días después, me llega el libro pero el de correos no me encuentra en casa y debo ir a recogerlo;
11) Lo recojo, casi tres semanas después de mi gestión 1).

Espero que valga la pena todo esto.

Del diario de Berr

Cuantos más afectos tienes, más personas que dependen de ti porque las quieres, o simplemente porque las conoces, más se multiplica el dolor. Sufrir uno mismo no es nada, nunca emitiría yo una queja a propósito de mi, porque todo sufrimiento personal, por el momento, es una victoria que lograr sobre mi misma. Pero qué angustia por los demás, por los allegados y por los otros.

Diario de Hélène Berr, 2008.