Esto complementa lo que les dejé en Delibes, una introducción. Es también de esa época y la redacción igualmente casera.
Cuando murió, les dije mis preferidas.
La sombra del ciprés es alargada
Obsesión por lo efímero del paso del tiempo. La muerte. Reflejo de su recelo personal por la posible muerte de su padre. Pedro: melancólico y triste como era él. Adaptación TV. Parte mala (Nadal exigía nº de páginas). Lo mejor: ambiente frío de Avila acorde con la muerte. Barroca y preciosista.
Aún es de día
Como la anterior, escrita en estado de virginidad literaria: engolado, grandilocuente, retórico. Le parece tan mala como la primera.
El camino
La escribe en 20 días. Ya presentes su estilo y magistral dominio del lenguaje. Cine y TV. Aquí arranca la novelística Delibiana. Es donde Miguel encuentra su «camino». Aquí fiel a sí mismo, a cuerpo limpio. Intento de recuperación de su infancia (lo único que reduce a los hombres a un común denominador). Giro: escribe ya él realmente. Daniel El Mochuelo. Amistad truncada por la muerte, como en El ciprés.