Muchas de las cosas que salen en este libro, que no llegó a publicarse hasta la muerte de Franco, ya se mencionaban con menos detalle en los dos libros ya comentados (uno y dos). Ahora se estira un poco más la cuestión con las 8 entrevistas que mantuvo con el “número 1”. Podría haber sido, sin más, un capítulo más largo de su libro dedicado a la gente importante.
Para mi coincide con ser lo primero que leo sobre Franco, como un primer acercamiento.
Cuatro temas: su carácter huidizo (paciente, tímido, ecuánime, prudente, talentoso; astucia, silencio, pausa; frente a la vehemencia, locuacidad y apresuramiento nuestros, tan hispánicos); la guerra civil española (durante y después); el autoritarismo asfixiante y la independencia de las instituciones; la sucesión.
Sus impresiones me parecen equilibradas. Ni al Olimpo ni al Hades, un líder con cualidades y limitaciones. Desmitificación. Como dice Ansón en el prólogo, es tomado de la mano y bajado del pedestal. Pemán critica la excesiva concentración de poder (muy pocos pusieron peros en vida al General) y su insensibilidad con lo cultural.
“El contenido de los grandes herméticos no se escucha o se deduce; se huele.” No había realmente diálogos: o silencios o monólogos. Los dos extremos. “Tengo la impresión de haber conocido al hombre que mejor se calla en España”.