En los párrafos siguientes hay dieciséis nombres propios femeninos escondidos. No hay hipocorísticos (p. ej, Loli de Dolores).
«El enamorado Mariano, natural de Andalucía y su jefe Juan Andrés, natural de Galicia, ya no hablan cada mañana de la crisis económica. Sus análisis financieros agravaron la inestable situación. Como Mariano se siente valiente ha decidido regresar a su pueblo para empezar aquel interesante negocio que siempre había soñado. Quiere ser feliz».
[tomado de Juegos de palabras]