Soy defensor acérrimo de las bibliotecas públicas porque hay libros para leer y libros para comprar, y no siempre coinciden. Llegué a Granada pongamos un 1 de julio de 1994, pues el 3 ya disponía del carnet de la Biblioteca Pública de Andalucíaen esta ciudad. Ventajas:
1. Puedo disponer gratis de un fondo bien surtido que jamás llegaría a tener en mi casa.
2. Puedo sacar tres libros por dos semanas, renovables 10 días por internet.
3. Puedo sugerir, por internet, las compras que me parezcan. Y se me informa de que mi sugerencia ha sido aceptada (casi siempre) y, más tarde, de que el libro está esperándome en el estante correspondiente.
4. Puedo reservar por internet.
5. Puedo enterarme en mi casa si un libro lo tienen o no, si está prestado y hasta cuando.
6. Puedo sacar 2 audiovisuales por semanas (un CD de música, un DVD con un documental, o una peli, o un concierto).
2. Puedo sacar tres libros por dos semanas, renovables 10 días por internet.
3. Puedo sugerir, por internet, las compras que me parezcan. Y se me informa de que mi sugerencia ha sido aceptada (casi siempre) y, más tarde, de que el libro está esperándome en el estante correspondiente.
4. Puedo reservar por internet.
5. Puedo enterarme en mi casa si un libro lo tienen o no, si está prestado y hasta cuando.
6. Puedo sacar 2 audiovisuales por semanas (un CD de música, un DVD con un documental, o una peli, o un concierto).
¿Aún no tienen su carnet? (que, creo, sirve para todas las bibliotecas públicas en nuestra CCAA)