El escritor debe conocer el mundo real.
Es posible que la aparente dificultad de la escritura no resida en lo que se piensa. A mi juicio, la verdadera prueba la constituyen los requisitos de la escritura que convierten en necesidad absoluta la relación sostenida y repetida con el mundo; quiero decir que estoy convencido de que no hay nada en el mundo, fuera de libro, tan interesante como lo que ese día estoy haciendo en el libro. La mayor exigencia es la de creer en mi propia inventiva y pensar que otros a los que no conozco, y que disponen de tiempo, también serán persuadidos. Para eso ayuda mucho saber qué brillantes atractivos hay fuera de tu habitación y allende los límites de tu fantasía.
Richard Ford. Flores en las grietas.
Autor: Javier Cercas Rueda
En 1965 nací en Sevilla, donde he vivido casi treinta años con un pequeño paréntesis de cuatro en Jerez. En 1994 me trasladé a Granada, donde sigo desde entonces. Estudié Economía general, he vivido once años de mi vida en Colegios Mayores, y desde 1995 hago crítica de libros y he mantenido diferentes relaciones con el mundo de la comunicación. Entre las cosas que me hacen más feliz están mi familia, mis amigos, los libros que he leído y haber subido en bici el Galibier.
AVISO IMPORTANTE
Conviene volver a recordar que el autor de estas entradas, Francisco Javier Cercas Rueda (Sevilla, 1965), que firma sus escritos como Javier Cercas Rueda (en la foto a la derecha) y José Javier Cercas Mena (Ibahernando, Cáceres, 1962), que firma los suyos (como Soldados de Salamina) como Javier Cercas, somos dos personas distintas.
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