Libros de cabecera

Los libros que conviene tener siempre a la cabecera son los que son capaces en toda circunstancia de darnos un consejo o un movimiento favorables;
los que nos elevan por medio del relato de una vida ejemplar;
los que nos cuentan la existencia de un hombre parecido a nosotros y que nos tranquilizan por ello, como Montaigne;
los que nos revelan el universo tal como es;
los que nos hacen participar en otras existencias, en otros medios y en otras épocas;
los que lo resumen todo;
los que son como cánticos.

Jean Guitton