Flannery

Me rindo con Flannery O’Connor. No me va. Con dos intentos terminé hace años su colección de relatos Un hombre bueno es difícil de encontrar y ahora me había puesto con el epistolario El hábito de ser. Hice un parón y busqué sus otros relatos contenidos en Las dulzuras del hogar y desisto tras atascarme con varias de las historias por más de dos meses. De todos modos seguiré con el epistolario, que me parece interesante pero no tanto como prometían quienes me lo han recomendado. La edición de Lumen de sus Cuentos completos, ya la he comprado dos veces en dos casas distintas, así que lo he intentado a conciencia. No me atrapan sus historias, se me hacen pesadas y encuentro el estilo denso. Algunos finales son impactantes, aunque esto no es fundamental, el problema es que no logro interesarme por lo que me está contando. Y fin.

El relato según O’Connor

Un cuento es una acción dramática completa, y en los buenos cuentos los personajes se muestran por medio de la acción, y la acción es controlada por medio de los personajes. Y como consecuencia de toda la experiencia presentada al lector se deriva el significado de la historia. Por mi parte prefiero decir que un cuento es un acontecimiento dramático que implica a una persona que comparte con nosotros una condición humana general y que se halla en una situación muy específica. Un cuento compromete, de un modo dramático, el misterio de la personalidad humana.

Para el escritor de ficciones, en el ojo se encuentra la vara con que ha de medirse cada cosa; y el ojo es un órgano que además de abarcar cuanto se puede ver del mundo, compromete con frecuencia nuestra personalidad entera. Involucra, por ejemplo, nuestra facultad de juzgar. Juzgar es un acto que tiene su origen en el acto de ver. En la escritura de ficción, salvo en muy contadas ocasiones, el trabajo no consiste en decir cosas, sino en mostrarlas.

Un buen cuento no puede ser reducido, sólo puede ser expandido. Un cuento es bueno cuando ustedes pueden seguir viendo más y más cosas en él, y cuando, pese a todo, sigue escapándose de uno.

Flannery O’Connor (1925-1964)
[fuente: LibrosEnRed]

Más sobre Flannery O’Connor

Ni ha escrito mucho ni tampoco es para tanto, y ni siquiera he leído todo lo suyo, pero pasa a veces que te «enganchas» a un autor y todo lo que lees sobre él te llama la atención. Aquí tienen dos visiones de sus Cuentos completos que me llamaron la atención.