La Real Academia Española, la institución máxima que regula los usos y abusos del lenguaje, ha incorporado un nuevo lote de palabras provisto por las 22 academias nacionales asociadas. Desde hace unos 10 días, la web del Diccionario de la Academia muestra las 4618 modificaciones aprobadas entre junio de 2004 y diciembre de 2006, el último período de evaluación que las comisiones constituidas para este fin se tomaron.
Así, expresiones como aeromoza («azafata de aviación»), nocaut («golpe que deja fuera de combate»), modernez (forma despectiva de aludir a la modernidad), animal político (quien revela «cualidades innatas para el ejercicio político») y neura (persona «nerviosa, obsesiva y maniática») han pasado a ser parte de nuestro lexicón. Y, así también, palabras que ya tenían su entrada en el diccionario han recibido una nueva acepción.
Este es el caso, sobre todo, de los términos informáticos. Colgar, por ejemplo, ya no es solamente «suspender, poner algo o a alguien sin que llegue al suelo», sino también «introducir una información en una página web para su difusión». Y maximizar es más que «hacer o intentar que algo alcance su máximo rendimiento»: es además «hacer que la ventana en que aparece la información en la pantalla de un ordenador tenga las mayores dimensiones posibles». En la misma línea podemos seguir con las voces minimizar, descargar, sitio, etcétera, etcétera.