Ritos de muerte. A raíz del artículo que preparé a principios de año sobre novela negra, sigo poco a poco rellenado lagunas. Ha sido el turno de Alicia Giménez Bartlett, que lleva varias novelas protagonizadas por la inspectora Petra Delicado (Barcelona). En la primera presenta a su personaje, y a su ayudante (que no sé si sigue en las siguientes), enfrentados a un feo caso de violador reincidente. Ella es una intelectual con poca experiencia de calle y él un poli casi jubilado. Lo mejor del libro es la relación entre ambos.
«La vida es tan fea…» dice casi al final Petra. El fondo de la historia es tan negro como los hechos que se cuentan. Petra tiene en contra a sus dos ex-maridos, a los delincuentes, a las víctimas y a sus familias, a sus jefes, a algún compañero, a los periodistas; además debe vencer la hostilidad hacia una mujer en un trabajo de hombre. Una carrera de obstáculos.
No está mal la novela, aunque un poco vista toda la cuestión de lucha de sexos y muy endeble la interpretación social del delito. Está escrita correctamente y con un perfil no excesivamente duro.
Yo le daría un "Bien menos" por todo porque se pierde la trama por tanto rollo sexista :S