Relatos de Lem. Máscara

LEM_MáscaraEl Telepático Peripatético está completamente cargado de las carnosas células de la Memoria Semántica, con los pedúnculos del Translator Alveolar, así como con una monumental Glándula Mnemónico-Mnéstica. Así mismo, está provisto de sendas bocas, de la trompa competente (TC) y de un Interglococóm, o sea, de un Comunicador Interplanetario Glosolálico-Coheréntico-Contemplativo.

¿Se trata de una broma? No, es de uno de los 13 relatos de Lem contenidos en Máscara, y que configuran el tomo XXIII de sus obras completas, reciente y bellamente editados por Impedimenta. El que no haya leído nada de Lem (como yo) y desconozca su mundo imaginativo y sus preocupaciones, deseará salir corriendo ante estas piezas de difícil comprensión. Se aprecia imaginación, elaboración cuidadosa y despliegue de nombres, aparatos, especies y lugares y se intuyen algunos temas (las máquinas y el hombre, viajes, invasiones, seres, el desarrollo intelectual humano y sus límites, etc). Pero es difícil entender algo si se empieza por estas piezas aisladas, situadas por sus editores fuera de los ciclos que agrupan sus libros.

En fin, entre la inaguantable Solaris de Tarkovski y esto, veo que Lem no es lo mío.

Autor: Javier Cercas Rueda

En 1965 nací en Sevilla, donde he vivido casi treinta años con un pequeño paréntesis de cuatro en Jerez. En 1994 me trasladé a Granada, donde sigo desde entonces. Estudié Economía general, he vivido once años de mi vida en Colegios Mayores, y desde 1995 hago crítica de libros y he mantenido diferentes relaciones con el mundo de la comunicación. Entre las cosas que me hacen más feliz están mi familia, mis amigos, los libros que he leído y haber subido en bici el Galibier. AVISO IMPORTANTE Conviene volver a recordar que el autor de estas entradas, Francisco Javier Cercas Rueda (Sevilla, 1965), que firma sus escritos como Javier Cercas Rueda (en la foto a la derecha) y José Javier Cercas Mena (Ibahernando, Cáceres, 1962), que firma los suyos (como Soldados de Salamina) como Javier Cercas, somos dos personas distintas.

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