Una joven murió asesinada, el principal sospechoso huyó y el caso se cerró. Treinta años más tarde una amiga de joven quiere escribir un libro indagando y contando qué pasó. El caso se reabre.
Hay un rico arrogante, violador y acosador.
Hay un pervertido mirón que sufrió abusos sexuales de niño por parte de su madre.
Hay profesoras que se lían con alumnos de ambos sexos.
Hay un rizo del rizo, una historia de amor entre lesbianas que además resultan medio hermanas.
Hay un poli corrupto.
Y están Stride y Serena y Maggie, que ya aparecieron en las anteriores novelas de Freeman.
Tres hilos, el componente emocional del asunto (la asesinada era hermana de la mujer de Stride), los pasos propios de la investigación policial (interrogatorios, nuevas pruebas, etc) y el trasfondo hipermorboso. Freeman se ha salido de madre.
Mal.
