Lo clásico según Steiner

En toda mi obra, y más explícitamente en Presencias reales (1989), he realizado la apuesta por las relaciones, por opacas que sean, entre palabra y mundo, por las intenciones, por dificil que resulte descifrarlas, de los textos y de las obras de arte que exigen un reconocimiento. En este caso, como tantas veces le ocurre a nuestro confuso ser, la simiente vital, la pauta de la vida, es el sentido común. Pero insisto en que todo acto de comprensión se queda corto. Se diría que el poema, el cuadro, la sonata trazan un último círculo alrededor de sí mismos, creando así un espacio de inviolada autonomía. Defino un clásico como aquel alrededor del cual este espacio es perennemente fructífero. Nos interroga. Nos obliga a intentarlo de nuevo. Convierte nuestros encubrimientos, nuestras parcialidades y nuestros desacuerdos, no en un caos «relativista», en un «todo vale», sino en un proceso de ahondamiento.

George Steiner, Errata.

Arte y verdad. Lo bello no es nada separado de lo real, de lo que es, de lo verdadero.

Autor: Javier Cercas Rueda

En 1965 nací en Sevilla, donde he vivido casi treinta años con un pequeño paréntesis de cuatro en Jerez. En 1994 me trasladé a Granada, donde sigo desde entonces. Estudié Economía general, he vivido once años de mi vida en Colegios Mayores, y desde 1995 hago crítica de libros y he mantenido diferentes relaciones con el mundo de la comunicación. Entre las cosas que me hacen más feliz están mi familia, mis amigos, los libros que he leído y haber subido en bici el Galibier. AVISO IMPORTANTE Conviene volver a recordar que el autor de estas entradas, Francisco Javier Cercas Rueda (Sevilla, 1965), que firma sus escritos como Javier Cercas Rueda (en la foto a la derecha) y José Javier Cercas Mena (Ibahernando, Cáceres, 1962), que firma los suyos (como Soldados de Salamina) como Javier Cercas, somos dos personas distintas.

Deja un comentario