Hace unos años leí Relatos de lo inesperado, de Roal Dahl. Recuerdo bien que probé con la boca chica a ver qué tal, pues lo tenía asociado a la literatura infantil y juvenil. Y me encantó el libro. Historias redondas, con brillantes golpes de efecto en los finales. Todas buenas. Un acierto total. He recomendado mucho este libro como ejemplo de literatura entretenida de calidad.
Ahora saco de la biblioteca pública La venganza es mía, S.A., otra colección de historias. Y nada que ver. La primera, que da título al libro es una buena idea pero con un final flojo, poco trabajado. Las demás, que van hilvanando los mismos personajes, son unas peripecias con poco interés de un tipo de que elimina ratas, otro que tiene un galgo de carreras y otros personajes un tanto absurdos. No me ha cogido en ningún momento. Un chasco. Son historietas tontorronas poco trabajadas, sin pizca de inspiración y con escaso atractivo.