Sofismas de Vicente Núñez

NUÑEZEl cordobés Vicente Núñez (1926-2002) publicó este casi millar de aforismos en el suplemento dominical del diario Córdoba entre octubre de 1987 y diciembre de 1992.

Piezas breves, completas e intensas, con menos contenido relativista del que podría esperarse por el título con el que el autor las engloba.

Me ha gustado regular, aunque tiene cosas buenas. Con demasiada frecuencia lo he encontrado oscuro y en pocas ocasiones he encontrado auténtica belleza formal.

Ahí va una pequeña selección:

El hombre que se apoya en el aire adquiere la consistencia de las estrellas.

Todo uniforme desnuda.

Lo que la arruga expresa es conducta.

¿Pero qué vas a averiguar por una carretera? ¡Métete por las trochas!

Tienes que hallar tu soledad; ese es el dormitorio del ser.

Si no cierro los ojos, ¿cómo voy a ver?

La carcajada de la naturaleza de la ciencia es olímpica.

Todas las posturas incómodas son elegantes.

Un solo bostezo aniquila diez años de intensa pasión.

Sólo en el torero coinciden el hombre con el macho. Nunca más.

Delibes. Un año de mi vida

DELIBES_DiarioDelibes no dejó unas memorias, sólo algunos recuerdos en forma de artículos y un dietario de un año, de junio del 69 a junio del 70.  Este, los artículos más personales y sus libros de viajes forman el tomo VII de sus Obras Completas (Círculo de lectores y Ediciones Destino, 2007).

Los temas tratados, día a día, son los mismos que los de sus artículos. Aquí se añaden menudencias domésticas, muy de pasada asuntos familiares, visitas que hace o recibe, actividades (conferencias, presentaciones), lecturas y comentario de noticias de la actualidad de ese periodo.

En cierto sentido se trata de un diario muy poco personal, y a la vez está todo Delibes de cuerpo entero. Nada de chismes ni revelaciones. Claro pero respetuoso con las cosas que no comparte. Por supuesto, su castellano riquísimo de siempre.

A mi me ha encantado, y me parece un complemento muy enriquecedor del Delibes novelista.

Relámpagos. Nuevos aforismos de Eder

EDER
Estupenda esta nueva recopilación de aforismos de Eder.

Reproduzco este acertado párrafo final (que, por cierto, no queda claro si es del propio autor o no):

El aforismo como relámpago

El amor, la muerte, el paso del tiempo, los viajes, la injusticia, del destino, el poder, los paraísos perdidos, el egoísmo, el sentido de la vida, la amistad, la ambición, la belleza. Punto. Éstos son los grandes temas literarios. El escritor de aforismos escribe sobre todos estos temas osadamente porque el género es así, superficial y profundo a la vez. Con la máxima brevedad el aforista trata de decir algo que merezca la pena de ser leído y recordado. Perfección formal, agudeza, lucidez, ironía y gracia son algunas de las características que salvan al género aforista. Si no, se cae en la tonta ingeniosidad, en las meras ocurrencias, en una estéril grandilocuencia. Pero cuando el aforista acierta se produce el milagro. Los buenos aforismos son como relámpagos en la oscuridad.

He marcado tantos que no vale la pena reproducir algunos. A mi me interesan más los consejos, los que ayudan a vivir, los que me afectan, aunque también disfruto con sus ocurrencias, sus comparaciones felices y los reconocimientos de cosas que yo también pensaba y nunca hubiera dicho tan bien. Eder es claro, sencillo, A es B, tiempos en presente, construcciones transparentes. Casi todas sus frases tienen algo, es difícil descartar alguna absolutamente.

Por si no quedó claro la otra vez que apareció por aquí, no pierdan más tiempo y léanlo cuanto antes. También tiene actividad en presente en Facebook.

Aquí pueden ver a Eder leyendo algunos de estos aforismos.