Hace poco hablábamos de las características que debe tener un relato, según Angel Zapata, para que logre atrapar e interesar al lector desde el comienzo. Este libro de Pelecanos es un buen ejemplo de oficio. Desde la página uno estás enganchado a los Pappas y su restaurante, a los Monroe y a su esfuerzo por salir adelante, luego viene el choque racial, el conflicto, y la historia avanza después treinta años, con un giro positivo para la mayoría de ellos.
Pelecanos sigue fiel a su mundo (Washington, el racismo, la violencia, la lucha por la vida) para escribir ahora una bonita historia de superacion. Los hechos no se pueden borrar y sus huellas pueden ser muy duraderas, pero siempre podemos hacer con ellas lo que queramos. Desde la venganza al perdón, pasando por la indiferencia. Ni el color de la piel, ni la clase social determinan al hombre.
Muchos signos de identidad de Pelecanos: el interés por los personajes jóvenes, el reflejo de la cotidianeidad (títulos de canciones, marcas), los efectos de la violencia y de la guerra.
Con este, quedan comentados en el blog 5 de los siete libros de Pelecanos publicados hasta ahora en España. Este no es de los más intensos, pero está muy bien.
Sobre los anteriores:
Ojo por ojo
El jardinero nocturno
Revolución en las calles
Música de callejón