Muerte al aburrimiento

De la entrevista a Harlan Coben en ABC (12 de junio de 2009) quiero destacar estas respuestas:

– Parece un tópico decir que su novela engancha y no hay manera de soltarla, pero es verdad. Engancha de un modo abrumador. Habrá en ello una parte de técnica pero tiene que haber algo más. ¿Cree que tiene usted «temperamento de thriller»?
-No podríamos llevar todo este rato hablando de todo esto, de la Administración Bush o del Gran Hermano, si esta historia no se hiciera leer, no mantuviera el deseo del lector de llegar hasta el final. Y para eso no hay una fórmula mágica. Tú puedes tener la mejor maquinaria para sacar petróleo, pero si no hay petróleo… tienes que tener una historia, unos personajes que te importan. No es algo meramente cerebral, implica emociones. El pathos mueve la historia.
……….
-Es verdad que una de las claves de su «enganche» puede ser una inmensa curiosidad por lo humano. Hay situaciones, diálogos y escenas que para sí quisieran muchas novelas «serias».
-A veces la única diferencia entre una novela «seria» y un buen thriller, es que la novela «seria» es más aburrida… Si mis libros se vendieran menos y no versaran sobre crímenes yo tendría más posibilidades de ser considerado un escritor «serio». Y fíjese en una cosa: todas las grandes novelas que han sobrevivido más de cien años contienen algún crimen. Dostoyevski, Wilde, Dickens, Dumas, incluso la Biblia… ¿Puede citarme una sola gran novela que no incluya elementos de suspense y de thriller clásico? Uno de los problemas actuales, que no existía antes, es que la llamada novela «seria» carece muchas veces de argumento. Y de interés. Porque sólo trata del ombligo de su autor.

La diferencia con el best-seller de temporada es que las buenas historias (y las de Coben lo son) son complejas, verosímiles, intensas, emocionantes y duraderas. Hay novelas «serias» muy entretenidas pero también hay historias de misterio y acción muy bien hechas que merecen llamarse auténtica literatura.

Aquí tienen la entrevista completa.

Aurora boreal

Novelón.

La sueca Larsson (Kiruna, 1966) debuta con este intenso drama psicológico. El predicador Viktor Strandgard es salvajemente asesinado en la Iglesia protestante de Kiruna donde trabaja. Su hermana Sanna, que descubre el cadáver, vive con dos hijas pequeñas y mantiene una tensa relación con sus padres y con el propio Viktor. Los tres pastores de la Iglesia libre, y con ellos toda la comunidad, se cierran en silencio ante los investigadores, para evitar así publicidad negativa. Rebecka tuvo en la juventud una difícil relación con Sanna y su familia y también con uno de los pastores. Ahora es abogada en Estocolmo y se ve obligada a volver a Kiruna cuando algunos indicios apuntan a la culpabilidad de Sanna.

Continuar leyendo «Aurora boreal»

Contrarreloj

Para ir ambientándonos para el Tour.

Cuarta novela de Fuentes (Cáceres, 1958) protagonizada por el detective Ricardo Cupido. Lo más original de esta historia policiaca es la ambientación, el Tour de Francia. El crimen se produce en medio de un ambiente y una afición muy alejados del fanatismo y de la violencia. El escritor explota este contraste y analiza el mundillo del ciclismo de élite en claves humanas y pasionales que presentan desde un nuevo ángulo el deporte profesional.

El líder de la carrera es asesinado el tercer día. Hay 21 capítulos, tantos como etapas tiene la carrera, y la investigación se centra en varios sospechosos a quienes no faltan motivos para quitar de en medio a una persona arrogante, odiosa como rival. Una ex-mujer que quiere defender la custodia de sus hijos, un competidor cansado de segundos puestos, un ciclista veterano con una esposa muy guapa, el padre de un ex-ciclista con cuentas pendientes y un siniestro doctor con jeringas de oro que suministra ayudas extra para llegar antes a la gloria.

Continuar leyendo «Contrarreloj»