Más artículos de Delibes

DELIBES_FútbolDELIBES_He dichoHe dicho (1996) y El otro fútbol (1982) son recopilaciones de artículos de Delibes que se suman a Pegar la hebra (1990) y Vivir al día (1968).

A mi me gustan sobre todo los dedicados a amigos (Félix Rodríguez de la Fuente, Umbral, otros menos conocidos,…) y los de recuerdos. Después los de libros, suyos y de los demás: el premio Nadal, la novela El Alpe D’Huez, Faulkner, sus deudas literarias, etc. En tercer lugar pondría los de cine (sexo y violencia en el cine, Paco Rabal, el arte de dirigir niños, y otros). Y en cuarto lugar, que son los que leo primero para dejar lo mejor para el final, caza, naturaleza, fútbol, Castilla, periodismo o asuntos varios.

Es sin duda ya uno de nuestros clásicos, y se le puede coger por cualquier página de sus Obras Completas. Siempre está bien, siempre es honesto, siempre fundamenta lo que dice.

Días felices en Argüelles. Memorias de Umbral

UMBRAL_DíasEste libro me ha encantado y me he comprado al terminarlo Trilogía de Madrid, sus memorias literarias. Estas de Argüelles dice que son las periodísticas.

Habla de muchas cosas: la generación del 36, la prensa, Cela («la prosa más expresiva, más retórica y sobria, más cuajada de la literatura española del siglo, después de Valle-Inclán«) y Hierro («A sus pies, la bombona del oxígeno que de pronto se colgaba al hombro, como un ala de salud, para marcharse»).

Delibes, González Ruano, el 27, los 125 libros que ha escrito, los premios recibidos, los angloescritores y los socialrealistas. Umbral como periodista y/o poeta («Yo no olvidaba que el dinero estaba en los periódicos, pero la poesía era el lujo de mi vida»).

Abundantes hechos, personas e ideas, enlazados magistralmente por la mente fértil y descarada de Umbral, quien en el fondo siempre estaba escribiendo el mismo libro (llámese Las palabras de la tribu, Un ser de lejanías o Diccionario de literatura: España: 1941-1995).

Tomás Segovia. El tiempo en los brazos I

SEGOVIA_Tiempo_ITomás Segovia (1927-2011) es un poeta valenciano que vivió gran parte de su vida exiliado en México. Pre-Textos ha publicado en dos tomos (1950-1983 y 1984-2005) las notas que iba tomando en sucesivos cuadernos a lo largo de su vida. Están editadas por el autor, con supresiones e iniciales en el lugar de muchos nombres.

Ni son propiamente diario íntimo ni testimonio de época, aunque a veces algo de eso hay. Predomina lo reflexivo, el ensayo breve. Segovia es sobre todo un pensador al que gusta ejercitar su inteligencia con una pluma entre las manos.

Habla mucho de arte y poesía, de Dios y de los demás, del silencio y la soledad. Poemas, prosas, aforismos, epigramas, ensayos, lecturas, películas, retratos y comentarios. Sus escritores admirados (JRJ, Camus, Mann, Valéry) y los denigrados.

Frecuentemente encabalga reflexiones sobre lo que le preocupa en el momento: la esperanza, la libertad, la pereza, el sacrificio, la botánica o la obediencia. No suele ser muy benévolo en sus juicios hacia los demás y cansa un poco el tono de queja permanente (sobre todo por la falta de tiempo para escribir).

Una inteligencia superior, sin duda, y desde muy joven. Un grueso volumen con muchas cosas interesantes pero que me ha costado algunas semanas digerir. Ahora no tengo prisa por buscar el segundo.