Concierto para instrumentos desafinados. Vallejo-Nágera

VALLEJO-NAGERA_ConciertoUna conversación me ha llevado a releer partes de este libro de Vallejo-Nágera del que conservaba buen recuerdo. Son ocho historias de casos clínicos que llevan adheridas muchos más pacientes y situaciones. Todas componen un cuadro duro y realista de la psiquiatría en España en los 50 y 60. Es un libro atrayente y bienintencionado, que dice mucho de la calidad personal de V-N. Amor a su profesión, a los enfermos, sentido común y positivo. Lleva a cabo una buena divulgación de algunos graves trastornos psíquicos. Tiene personajes inolvidables (Higinio, el catatónico que recupera el habla; Manuel, el generoso paralítico que muere apaleado) y también otras historias más chuscas y desagradables (los locos que se van de putas, los abyectos comportamientos sexuales de algunos enfermos, etc).

A mi V-N me cae muy bien en general, sobre todo desde que leí el libro de Olaizola que cuenta su muerte (La puerta de la esperanza). Otra cosa es que sea un gran escritor. En este libro, en concreto, hay muchas escenas que pueden narrarse con muchas menos palabras y en muchas expresiones falta sencillez (prefiere arribada a llegada, y cosas así). No se puede ser excelente en todo. Como literatura de médicos me parecen de más calidad los libros de Sacks, por ejemplo. También están algunos otros de los que ya les hablé hace años.

Rosa Krüger. Rafael Sánchez Mazas

SANCHEZ_MAZAS_RosaSánchez Mazas escribió esta novela durante la Guerra Civil española, e iba leyendo capítulos según los terminaba a sus compañeros de reclusión en la embajada de Chile en Madrid. Nunca la publicó. Vio la luz en 1984 por iniciativa de sus familiares.

Cuenta la historia de Teodoro Castells, un joven que deja el valle de Arán en 1921, alejándose de la atracción culpable que siente por su hermana Coloma, y se cruza unos instantes en la estación de Toulouse con una joven suiza, Rosa Krüger, de la que permanecerá para siempre prendado. Su trayectoria sentimental se completa con el matrimonio (Ángela) y con una aventura (Phoné).

Coloma es lo demoniaco en su vida, el caos; Ángela la moral utilitaria y doméstica; Phoné la lucha entre el bien y el mal; Rosa Krüger el amor angélico perseguido toda una existencia, una guía eterna, un motivo para ser mejor y algo a lo que no llegar nunca. Como las estrellas.

El libro está lleno por otra parte de viajes y tertulias, de narraciones orales de otras historias. Su historia de composición y publicación explica cierta fragmentariedad que hace echar en falta una revisión más de conjunto. De todos modos, la novela está bien y se lee con agrado la mayor parte del tiempo. Me sigue pareciendo mejor La vida nueva de Pedrito de Andía, una de las mejores novelas de iniciación de la literatura española.

La costumbre de vivir. Memorias de Caballero-Bonald

CABALLERO_BONALD_CostumbreSegundo tomo de las memorias de Caballero Bonald. Tiempo de guerras perdidas (1995, 350 págs) cubría desde 1926 hasta 1954, hasta sus 28 años. La costumbre de vivir (2001, 650 págs) llega hasta la muerte de Franco. No sabemos si habrá un tercero.

El propio CB dice que “no se trata de una autobiografía sino de un texto literario en el que se consignan, por un azaroso método selectivo, una serie de hechos provistos de su real o verosímil conexión con ciertos pasajes novelados de mi historia personal”. He seleccionado este pasaje para que se familiaricen con su modo de decir las cosas, no para desanimarles.

El libro es largo y hay que tener interés. No hay una sola frase descuidada. Sus ejes vitales son la literatura, la política (de izquierdas), la noche y el alcohol, los nubarrones depresivos, el flamenco, el mundo editorial, bares y prostíbulos y muchos amigos, mayoritariamente del mundillo del libro.

Sus opiniones de libros y autores tienen bastante interés, sus retratos son certeros. Generoso con los que respeta (Cela, Barral, Gil de Biedma) y contundente con lo que no (“Se decía poeta, y lo era en la línea de los almacenistas de charcuterías líricas, amén de un parlanchín de mucha hojarasca”).

CB es un maestro….de la literatura. No busquen nada más. Con esta premisa, con algún conocimiento de nuestra literatura de los 50 y con no poco tiempo por delante, este es un buen libro que no les defraudará.