El padre de un asesino

Me gusta la ficción que se desarrolla en ambiente escolar. Por eso he leído El padre de un asesino (1981). Cuenta una hora de clase de griego en un colegio alemán en 1928. El director del centro, el padre de Himmler, entra por sorpresa y quiere calibrar el nivel del curso. Hay tensión y humillaciones, pulsos y violencia psicológica. No es una gran historia aunque se lee con interés y rapidez. En cien páginas Andresch (1914-1980) no consigue desarrollar bien los personajes ni las relaciones entre ellos. De pronto suena el timbre y fin de la clase. El título del libro despista pues no se trata de un libro sobre el nazismo.

Un párrafo de la reseña optimista que me animó a esta lectura, de la que no me arrepiento pero que no estará en mi lista de lecturas destacadas del 2008.

«En el relatose describen la disciplina, las clasessociales, los judíos: pequeños detalles que manifiestan el ambiente de los inicios del movimiento hitleriano. El lenguaje está muy cuidado, la ambientación es perfecta,el ritmo no decae, y se lee fácilmente, de un tirón, con interés y agrado».