Tania James

Salamandra, como frecuentemente, con sus libros que no están mal, pero a los que siempre falta un hervor.

Primera novela de Tania James, nacida en Estados Unidos y de ascendencia india. Cuenta la intensa historia de dos hermanas, Linno y Anju. Dotadas ambas de gran talento, huérfanas de madre desde pequeñas, católicas con débil formación, van a vivir la clásica trama de separación-reencuentro. Linno sufre un grave accidente y orienta su vida hacia la creación pictórica, Anju recibe una beca que la lleva un año a EEUU, donde se encontrará con una antigua amiga de su madre. Los retratos de la familia india de las hermanas y los de la familia que acoge a Anju, servirán a la autora para describir los tradicionales contrastes de choques -en este caso más bien cataclismos- culturales.

La historia se decanta hacia el drama sensible con unos contrapesos de realismo a ras de suelo que terminan por documentalizar el texto excesivamente. En ningún momento pierde interés la peripecia humana, pero el arco dramático pierde intensidad por las extensas alusiones a los colegios ricos, los trámites de inmigración, el entorno de varias profesiones y otras cuestiones.

James demuestra una mirada afilada para los detalles, y desgrana por aquí y por allá, como de pasada, comentarios y comparaciones llenos de inteligencia y de talento literario. La autora no arriesga y escribe sobre los temas de siempre, los lazos de la sangre, la amistad, el amor, el arraigo a la propia tierra, la mentira, la traición y el secreto. El toque social que imprime la cuestión de la emigración es bastante leve y llevadero. Buenos personajes a los que ocurren cosas interesantes, y contado con los giros e intensidades adecuados. Interesante debut.