Anna Seghers, La séptima cruz

SEGHERS
La recomendación indirecta de Reich-Ranicki, vía Chirbes, me lleva a esta célebre novela de 1942. Siete presos (no judíos) escapan de un campo de concentración alemán (Westhofen). El comandante promete capturarlos en menos de una semana y construye las siete cruces donde irá ajusticiándolos. Enseguida sabemos que sólo queda vivo Georg, escondido en el pueblo cercano al campo, que termina convirtiéndose en todo un símbolo de la resistencia al terror organizado. La novela fue adaptada al cine (Spencer Tracy).

Se me ha hecho muy pesada. La estructura es intrincada y confusa. Se emplean múltiples puntos de vista para contar qué está ocurriendo y el asunto avanza muy a trompicones. Es un estilo de libros en el que se entra o no se entra. Ya vi que la cosa no marchaba cuando no lo leía nunca más de diez minutos seguidos, y siempre encontraba algo más urgente que hacer. El esfuerzo por hacerme con el tono y el estilo no estaba estimulado por el interés en saber qué terminaba ocurriendo con Georg.

Que quede claro que parece un gran libro, al menos, para los citados, que saben de esto mucho más que yo. También lo alaba Guelbenzu, en cuyo criterio confío. Casi siempre.