Primer libro que leo de Patrick Modiano, veterano (64 años) y afamado escritor francés, siempre en las listas de Nobel.
125 págs, 6 capítulos, 5 narradores. El café de la juventud perdida cuenta la triste historia de Louki, una joven desnortada que no sabe que hacer con su vida. La cosa empezó mal desde su niñez, y desde entonces deambuló por amistades, matrimonio, trabajos, drogas, lecturas y esoterismo. Nada la llenó y siempre quería empezar de cero, como si lo anterior no hubiera existido. Pero eso no es tan fácil con sólo cambiar de nombre, de barrio o de cafés. Cuando por fin se dio cuenta lo resolvió por la tremenda. Un libro amargo.
A mi me ha gustado que sea breve, que esté bien contada, el juego de narradores y deambular literariamente por el París de los 60 (auténtica co-protagonista del libro), ahora bien, la historia es bastante rarita en fondo y forma y puede desconcertar a lectores convencionales que busquen tramás más precisas y menos fragmentarias.
No voy a salir corriendo a por otro libro de Modiano pero me gustaría leer algo más de él más adelante.
Eso es lo bueno, tener muchas cosas interesante por leer. El placer de las primeras lecturas es único.
os veo y pienso; pero cuanto me queda pendiente por leer y conocer.G racias javier por responder a los comentarios nunca prodras imaginar lo que acompañan.es maravilloso para mi escuchar hablar de libros; sois mi medicina psicologica.gracias
Gracias por los avisos. De momento, como decía en la entrada, engo suficiente Modiano por una temporada.
Acabo de leer «Dora Brudel», de este mismo autor, en Seix Barral. Bien escrita, pero no para entusiasmar.
Sale una novedad en Marzo, en Anagrama también: Calle de las tiendas oscuras, en la misma línea.
Saludos!
Si es por cosas pendientes, esta chica parisina las tiene todas. Un saludo
Pues a mi me gustaría leerlo, parece que es una historia que sale de lo convencional… no me cuentes mas.. voy a añadirlo a mi lista de libros pendientes.Me gustan las vidas de mujeres que tienen algo pendiente con ellas mismas y ¿sabes? , lo mejor de todo, es que puede suceder cualquier cosa con ellas….
Un abrazo! o dos besos poco efusivos… (soy catalana)
😉