Rafael Reig. Visto para sentencia

Rafael Reig, en Visto para sentencia, recopila unos 60 artículos que escribió durante un año para el Cultural de El Mundo. Pasa revista con agresiva sinceridad a autores, modas, premios y variados asuntos librescos. Artículos, prólogos y unos textos finales añadidos, sacados de su blog, que son aún más sangrientos. No es un charlatán. Dice, y justifica, lo que muchos piensan y no se atreven a escribir. Se califica de novelista fracasado que está por encima del bien y del mal y puede ser sincero. Y los lectores nos beneficiamos. Sólo recuerdo un libro parecido, el de Víctor Moreno De brumas y de veras, donde se destroza despiadadamente  a los críticos literarios. Ya he localizado en una biblioteca los dos tomos de Reig del Manual de lectura para caníbales. No me los pierdo. BIEN.

Dumas, Los tres mosqueteros

Tercera relectura de la primera novela de Dumas de ciclo de los mosqueteros.  La historia es archiconocida pero me temo (en realidad, sé) que muy pocos han leído el libro original (y, menos, las dos continuaciones). Las peripecias me han parecido frescas y entretenidas como las otras veces (¿a quien le importan los anacronismos en una novela?). Esta vez me he fijado un poco más en los cuatro personajes y me han resultado más oscuros, llenos de matices y muy alejados de las versiones aventurescas que ofrecen los medios audiovisuales. Son valientes, leales, desprendidos y generosos, nunca mienten; pero también susceptibles, irascibles, lujuriosos y bebedores. Dumas los excusa continuamente recordándonos que estamos en un tiempo (el de la novela) de moral fácil. Unos héroes en fin llenos de límites, humanos. Athos, como siempre,  mi favorito, y Milady más odiosa que nunca, si cabe. SOBRESALIENTE.

Flannery O’Connor y C. S. Lewis

• El por desgracia brevísimo Diario de oración de Flannery O’Connor vale la pena. No llega a la cincuentena de páginas, pero tiene cosas valiosas. Es una ventana a su mundo interior, de artista y de cristiana. Buen complemento a sus Cartas y Ensayos. Va desde enero de 1946 (tenía 20 años, vivía en Iowa City) hasta septiembre de 1947. “Me gustaría ser una santa inteligente”, “Querido Dios, ayúdame a ser una buena artista, por favor, haz que mi arte lleve a ti”. Se reproduce también en facsimil el texto completo. BIEN

Mero cristianismo, de C. S. Lewis, es uno de los mejores libros sobre fe cristiana que he leído en mi vida, y he leído muchos.  Así de claro. Es una delicia seguir a una inteligencia tan competente en cuestiones no fáciles, sin dar por supuesto nada, de modo respetuoso y convincente. SOBRESALIENTE.