El libro de Boyne sobre niños con pijamas en campos de concentración me pareció flojo y sentimentalón. No me interesan especialmente los libros de aventuras y menos en el mar (siempre llenos de términos técnicos). Tres: he visto las dos películas fundamentales sobre esto y no me dijeron mucho. Así que cuando vi una montaña (no exagero) de este libro en una librería recé interiormente porque no me tocara. Y me tocó. Una posibilidad entre cien que Aceprensa se fije en este libro (yo desde luego no lo iba a proponer) y, además, que me lo encargue a mi. Bueno, pues a pesar de mi poca predisposición, me ha gustado.
Los hechos. En 1787, al mando del capitán William Bligh, La Bounty parte hacia Tahití para cargar alimentos y llevarlos después al Caribe, para alimentar a esclavos de forma barata. Los meses que han de pasar en la isla de destino sirven para que la tripulación establezca lazos sentimentales con las nativas. Poco después de iniciarse la travesía hasta el Caribe, parte de la tripulación se amotina y vuelve a Tahití con el barco y otra parte permanece fiel a Bligh. Bligh consigue llegar a Inglaterra y es considerado un héroe. Una expedición posterior conseguirá devolver al país a algunos de los amotinados que serán condenados duramente.

