Lupin y Cagliostro

Inteligencia, ingenio, voluntad, destreza física, fuerza muscular, resistencia, innumerables talentos y recursos, sangre fría, ascendiente sobre los demás, capacidad de imponer sus decisiones, audacia, ideas claras, lógica, un genio que lee como en un libro abierto la mente de sus enemigos; con ustedes….¡Arsène Lupin!

Me cayó muy bien el personaje en Arsène Lupin, caballero ladrón, una colección de relatos que publicó El País. Intrigas elegantes y bien hechas. Un ser obsesionado por la aventura, la conquista, lo extraordinario y lo fabuloso, que no se detiene ante nada salvo el asesinato. Quería saber más de él y me encuentro que Edhasa publica todos los libros de Leblanc sobre este célebre ladrón.

Continuar leyendo «Lupin y Cagliostro»

El consuelo (Gavalda)

El protagonista es un arquitecto de cincuenta años que ha triunfado profesionalmente. Tiene malas relaciones con su familia, está amargado con su trabajo y su relación con la mujer con quien vive, con la que no está casado, está naufragando. Está cansado de todo y su amargura se le convierte en ironía apenas abre la boca. De niño-adolescente tuvo una relación con una mujer «especial» (también por el pequeño detalle de que era la madre de un amigo suyo; tipo «El graduado») que acaba de morir y de la que no sabía desde hacía años. Se reencuentra con su pasado y con su amigo de la infancia y, en éstas, inicia una nueva relación con otra mujer.

Un libro larguísimo para una historia penosa. Lo mejor de Gavalda es su estilo (ya comenté que me gustaron sus relatos), que también puede llegar a cansar un poco en su afán de sorprender y de probar cosas nuevas con las palabras.

Continuar leyendo «El consuelo (Gavalda)»

Bovary según Cheever


Cheever
siempre consideró Madame Bovary como uno de sus libros preferidos, y se refería a esta novela como «mi Yale College y mi Harvard. Es probable que la haya leído unas veinticinco veces. Varias de ellas en francés». En una entrevista de 1969, Cheever explicó:

«Es una gran novela porque su prosa es absolutamente precisa y simplemente perfecta. Madame Bovary fue un más que considerable momento de inflexión en la historia de la literatura, una verdadera innovación. Y está claro que todas las grandes novelas son innovadoras, pero Madame Bovary fue, para empezar, el primer relato que tenemos de una esquizofrenia controlada. Y es, también, una muy aventurera historia del tipo moral. Ya sabes que el libro fue censurado y Flaubert llevado a juicio. No hay dudas de que la parte más ofensiva de la novela es cuando Emma se sienta a fumar en la mesa».