Shálamov

Minúscula ha emprendido la edición en seis volúmenes de los Relatos de Kolimá. He leído (y lo dejo) un tercio del primero. Shalámov cuenta en breves historias el infierno de Siberia. El estilo tiene fuerza: laconismo, contención y latigazo final. Con esos 12 relatos me he hecho perfectamente cargo de lo que quiere transmitir, así que no he visto motivo para continuar.

Todo es triste e inhumano en estas historias. Frío, hambre, sueño. Todo les da igual a los prisioneros. No creer, no temer, no pedir: las tres reglas principales del manual del preso.

Es incorrecto emplear

De alguna manera. No usarlo de ninguna manera.

Delante mío, suyo, nuestro. Escríbase delante de mí, de él, de nosotros. Igual para detrás.

Directriz. Téngase en cuenta que es el femenino del adjetivo director. Es absurdo escribir: «los principios directrices en que se basa…».

Discapacidad, discapacitado. No existen estas palabras. Escríbase incapacidad, incapacitado, minusvalía, minusválido.

Dictar (una lección, una conferencia). Evítese y dígase «dar o explicar una lección», «dar o pronunciar una conferencia».

[Fuente: orden y reelaboración propia a partir del Libro de estilo de ABC]

Juan Belmonte, matador de toros

Por Manuel Chaves Nogalés.

Este libro se publicó en 1935 y está escrito en primera persona, como si narrara el propio mítico matador sevillano. Belmonte fue una figura importante y su concepción del toreo cambió la fiesta y el modo de enfrentarse al animal. Su trayectoria no difiere mucho de la de otros profesionales hasta el momento en que encuentra sitio en el mundillo. Desde ahí, su caso fue un paseo triunfal. Fue un torero de espíritu, más que de facultades. Era callado y serio, le gustaba leer y alternar con intelectuales. Están bien contadas su infancia y su relación con Joselito. El contenido técnico taurino es suficiente y no abrumador para no especialistas. Naturalmente se recogen las famosas frases que dijeron de el Rafael Guerra, Valle-Inclán y otros. El libro, sin estusiasmar, está bien y gustará a los aficionados.