Vázquez Montalbán

Ayer oí hablar mal de los libros de Vázquez-Montalbán y no estoy de acuerdo. Creo que es prudente, al hacer juicios, separar a la persona del escritor de sus obras. No lo tengo como escritor de primera pero tiene dos o tres libros bastante dignos, cosa que no pueden decir ni 20 escritores españoles del S. XX.

Aquí les dejo mi visión sobre su obra, recomendando lo que me parece más interesante de sus libros.

Escrutopo y Orugario

He releído con cuidado, a lo largo de un par de meses, tomando notas, las Cartas del diablo a su sobrino, de C. S. Lewis. Sigo pensando, como la primera vez que lo leí, que es un libro estupendo. Certero, animante, positivo, divertido, lleno de conocimiento y experiencia de la vida cristiana y de las posibilidades del corazón del hombre. Es imposible no verse retratado en muchas de las escaramuzas a las que se ve sometido el “paciente” del aprendiz de tentador. Lewis nos advierte de que siempre la verdad y la luz siempre pueden más, si se quiere.

Aquí les dejo la primera carta, para hacerse una idea del estilo y temática del volumen.

El padre de un asesino

Me gusta la ficción que se desarrolla en ambiente escolar. Por eso he leído El padre de un asesino (1981). Cuenta una hora de clase de griego en un colegio alemán en 1928. El director del centro, el padre de Himmler, entra por sorpresa y quiere calibrar el nivel del curso. Hay tensión y humillaciones, pulsos y violencia psicológica. No es una gran historia aunque se lee con interés y rapidez. En cien páginas Andresch (1914-1980) no consigue desarrollar bien los personajes ni las relaciones entre ellos. De pronto suena el timbre y fin de la clase. El título del libro despista pues no se trata de un libro sobre el nazismo.

Un párrafo de la reseña optimista que me animó a esta lectura, de la que no me arrepiento pero que no estará en mi lista de lecturas destacadas del 2008.

«En el relatose describen la disciplina, las clasessociales, los judíos: pequeños detalles que manifiestan el ambiente de los inicios del movimiento hitleriano. El lenguaje está muy cuidado, la ambientación es perfecta,el ritmo no decae, y se lee fácilmente, de un tirón, con interés y agrado».