La sabiduría de Lao-Tsé

• El Tao te King, de Lao-Tsé, es uno de los textos fundamentales del taoísmo. Está compuesto por 80 breves piezas que comprenden un aprovechable compendio de sabiduría práctica sobre cómo conducirnos en la vida: relaciones con los demás, las cosas materiales, la humildad, la guerra, el mando, etc. Recomienda la simplicidad y mantener a raya los deseos, y da consejos válidos sobre el amor y el liderazgo. Está escrito unos 500 años adC. Me gustaron más las Analectas de Confucio, pero esta lectura ha valido la pena. BIEN.

Los hermosos años del castigo es una breve e intensa novela de Fleur Jaeggy, suiza que escribe en italiano. Habla de la amistad de dos chicas en un internado. La historia resulta en conjunto algo asfixiante, por la exagerada dependencia que se establece entre las dos y por el propio ambiente agobiante de la institución. BIEN.

El libro de Martínez Mesanza me lleva a los Sonetos de Francisco de Aldana, autor que desconocía por completo. Unas cincuenta piezas de asunto amoroso o religioso.  BIEN.

Conferencias y charlas de Flannery O’Connor

Aún impresionado por la lectura de sus Cartas, busco el volumen de sus escritos sueltos (Misterio y maneras, ed. Encuentro: conferencias, charlas, prólogos, notas,…). Estilo llano y sin rodeos, certera y lúcida. Muy reconocible la escritora de las Cartas: amena, cordial, humana, amable, pícara, simpática, y a la vez rigurosa, profunda, muy consciente de su papel como escritora y como cristiana. El título está muy bien escogido como compendio de su concepción la escritura: una visión que halle el punto de encuentro entre lo cotidiano (la costumbre, y también las formas) y el sentido último de existencia. El artículo sobre el pavo y el prólogo a Mary Ann me han interesado menos, pero el grueso del libro es muy valioso: escritura, enseñanza de la literatura, lo sureño, lo grotesco, lo que aporta su fe a su visión y a su escritura (y lo que no se debe esperar que aporte). Ahora debería releer algunos de sus relatos.

La parte más humana de Flannery me ha hecho pensar varias veces en la polaca Szymborska, que tanto les he recomendado.

Les enlazo las notas que he tomado porque merecen la pena.

La segunda de Ramis: Las posesiones

2007. La narradora viaja a Mallorca preocupada por su padre, que empieza a tener comportamientos difíciles de explicar. Allí se reencuentra con un antiguo mentor y novio. Y, tercera línea argumental, se recuerdan unos sucesos de principios de los ochenta relativos al socio del abuelo de la narradora.

La novela radiografía un extendido vacío vital. Llámese poscinismo, posverdad, la falta de sentido y de propósito lleva a la superficialidad. La provisionalidad acaba en relaciones débiles y la ausencia de valores conduce a la corrupción y a la mentira.

En el libro todo esto es más descrito que analizado, no se llega al problema de fondo ni se insinúan soluciones. No es el papel de una novela, pero sí lo es emocionar y entretener y esta vez le falta a la autora la fuerza y tensión que logró en su primera novela. Ninguna de las tres líneas termina de interesarnos del todo y no hay asuntos ni enfoques nuevos en los temas abordados (familia, relaciones sentimentales, periodismo, escritura, poder, etc). En conjunto el libro es correcto pero poco destacable y su conclusión desalentadora: es mejor no indagar ni saber demasiado sobre los que queremos. APROBADO.