Ciencia-ficción. Hola y adiós


Y con Scott Card di por concluída mi pequeña cata veraniega en el desconocido mundo (para mi) de la ciencia-ficción. Sólo me ha interesado un poco Dune, aunque no como para pasar de la primera. Muy poco Ender y La Guía del autoestopista galáctico, y flojillos los relatos de Asimov y Clarke de los que les hablé.

Así que me sigo quedando, si alguien me pregunta por esto,  con cosas que leí hace muchos años, la serie Fundación de Asimov, las Crónicas marcianas de Bradbury, Tropas del espacio (Heinlein) y, por supuesto, 1984.

Claramente la ciencia-ficción no es lo mío.

Saga de Ender. Scott Card

Saga famosísima de la ciencia ficción, libro imprescindible en el canon de todos los expertos. Leo el primero.

Dos escenarios:
– Un conflicto interplaneario contra los insectores, otra especie inteligente. Ender Wiggin, un niño de 6 años, es formado para ser en el futuro comandante de la flota humana;
– Un conflicto político-militar en la tierra, básicamente Pacto de Varsovia contra la Hegemonía (USA y resto del mundo). Aquí intervienen los dos hermanos de Ender.

Casi toda la novela se va en la formación como líder y estratega de Ender, fuera de la tierra. Algo repetitivo. Luego viene el enfrentamiento con los insectores y, a grandes rasgos, todo lo que viene después.

Tiene algunos momentos buenos pero me ha dejado en general un poco frío, no ha despertado mi curiosidad para seguir con la saga. Me ha parecido un poco pomposa y aburrida toda la parte política y bastante inverosímil toda la responsabilidad que debe soportar Ender. El relato de su formación, en la Escuela de Batalla primero y en la de Alto Mando después, ya lo he dicho, demasiado alargado.